domingo, 13 de marzo de 2011

Balada 2 - Chopin

¡Hola! En esta oportunidad, y a pedido de mis lectores, voy a escribir sobre las 4 Baladas de F. Chopin.
Hoy comienzo con la Balada N°2, que ya forma parte de mi repertorio y dia a dia la disfruto al máximo.
En origen, la balada era un poema cantado, que mezclaba lo lírico y lo épico. Chopin compuso sus baladas entre 1831 y 1842, inspiradas en poemas de Adam Mickiewicz, amigo del compositor, y al igual que éste, exiliado en París
 he aquí una nota sobre una leyenda evocada por éste poeta romántico (1798-1855), acerca de una ciudad sumergida en un lago.

LA CIUDAD DEL LAGO DE SWITEZ
 "Quien quiera que seas, si tus pasos te conducen al país de Nowogródek, entra en la sombría selva de Pluzyny, y acuérdate de detener tus caballos, a fin de poder contemplar el lago.
"El Switez extiende allí su fondo claro, en forma de un gran círculo; antiguas y tupidas ramas ciñen sus negras orillas; el lago es pulido como un banco de nieve.
"Si te aproximas durante la noche, y vuelves tu faz hacia las aguas, verás estrellas sobre tu cabeza, y estrellas a tus pies, y dos lunas. Perplejo de si desde tus plantas el llano cristalino va hacia el cielo o de que el cielo incline hasta ti su cúpula de cristal.
"No alcanzando tus ojos las opuestas orillas, y no distinguiendo el fondo de la bóveda, parécete estar suspendido en medio de la esfera celeste, en no sé qué abismo de azur.
"De esta suerte, de noche, si el tiempo es favorable, la ilusión hechizará la vista. Pero, para ir de noche al lago, se debe ser el más osado de los hombres.
"¡Qué zarabandas dirige, allí, Satanás! ¡Y qué combates de espectros! Tiembla todo mi cuerpo, cuando los viejos relatan tales historias, y se tiene miedo de recordarlas cuando la noche se avecina.
"A veces, del seno de las aguas, sube el rumor de una gran ciudad, brota el fuego y una espesa humareda, y un tumulto de combatientes y clamores de mujeres, y el doblar a muerto de las campanas, y el resonar del choque de las armaduras.
"Súbitamente decae la humareda, el alboroto se apaga, sobre las orillas sólo el rumor de los abetos, dentro de las aguas un murmullo apagado de plegarias y de súplicas doloridas de vírgenes.
"¿Qué quieren decir tales cosas?"
El poeta (a partir de aquí, se trata de una paráfrasis del autor del libro) sigue narrando cómo el señor de Pluzyny, queriendo penetrar los misterios del lago, hizo tender en él grandes redes, con el auxilio de las cuales sacó a su superficie a una joven doncella, que reveló que aquellas aguas recubrían la ciudad de Switez, que en tiempo fue famosa por el valor de sus guerreros y la belleza de sus mujeres. Econtrándose indefensa esta ciudad ante las armadas del Zar de Rusia, sus habitantes rogaron a Dios hiciérala desaparecer bajo tierra antes que dejarla sucumbir bajo el furor de las hordas enemigas, evitando así su deshonra y su matanza.
Finida la narración, la doncella desapareció en las profundidades del lago, arrastrando consigo barcas y redes, mientras que un sordo rumor repercutía en la selva finisecular".

Todo lo cual, debidamente pasado por el tamiz romántico inevitable en aquella época, puede basarse muy bien en tradiciones orales de Polonia o Lituania (que, en los siglos XVI-XVIII, formaban un solo estado).

Cabe aclararles a mis lectores, que es muy complicado obtener información sobre estos poemas y lo poco que se consigue en libros, está en italiano o polaco, por lo tanto me lleva un tiempo mayor de búsqueda y redacción. Intentaré subir mas información sobre las 3 baladas restantes que son realmente obras excepcionales y fabulosas.


Espero que disfruten de esta: la 2da Balada de Chopin, la cual dejo 2 interpretaciones, 1ero la de K. Zimerman y luego mi versión personal, interpretada en Agosto de 2010 en la Catedral de La Plata.






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